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Invierte en optimización web, ¡valdrá la pena!

La optimización web es un concepto muy sencillo: permite que tu web siga siendo competitiva y que esté en una mejor posición en los buscadores para aumentar el tráfico y los clientes.

Si te estás preguntando si es necesario aplicar un protocolo periódico de optimización para la web de tu empresa o tu tienda virtual, la respuesta es un rotundo sí.

Optimizar la web es un proceso integral, que va desde la posición en buscadores hasta el diseño. Una web desfasada o mal posicionada solo supone una pérdida de recursos: Lo que se haya invertido en crear la web, no se recuperará ni amortizará.

En el mercado online, es muy importante conseguir visibilidad y que la web sea competitiva, de lo contrario, se perderá entre las miles y miles que forman el amplio abanico de páginas obsoletas y descartadas por los internautas.

Pilares básicos de la optimización web

El primer paso antes de llevar a cabo un proceso de optimización web es un diagnóstico en profundidad.

Al contrario de lo que se podría pensar, no basta solo con tener una web estéticamente atractiva, sino que hay que tener en cuenta otros muchos aspectos técnicos.

Los pluggins y widgets, la estructura HTML, la velocidad de carga de la página, el peso de las imágenes y las plantillas seleccionadas, la funcionalidad y usabilidad de la web, son algunos de los aspectos a tener muy en cuenta cuando trabajamos la optimización web.

Otro de los aspectos más importantes para optimizar una web es el posicionamiento y la redacción SEO.

Cuando una persona busca un término en un buscador online, que una web aparezca entre los primeros resultados (y, por tanto, con una mayor probabilidad de que la persona pinche en su enlace), debe estar bien posicionada y su contenido estructurado y enfocado al SEO.

Unos textos con un contenido de calidad y con una redacción SEO, permite que los buscadores lo seleccionen y aparezca en las búsquedas de las principales palabras claves que coincidan con las keywords de nuestra web.

¿Cómo se hace?

Una vez se ha llevado a cabo el diagnóstico integral de nuestra web, en el que analizaremos todos los aspectos de la misma y su posicionamiento web, hay que evaluar los aspectos que tenemos que mejorar.

¿Cómo mejoramos la web?

Cuando hayamos identificado los puntos débiles de nuestra web se puede poner en marcha un proceso de optimización web.

Una web debe ser intuitiva, fácil de utilizar aunque sea la primera vez que se navega por ella. Poner un menú sencillo, formularios de contacto, carrito de compras y pasarela de pago seguro, es esencial.

Que los textos aporten información precisa y clara sobre los servicios y productos, que la web sea atractiva, con un diseño adecuado, fresco y profesional tiene más importancia de lo que podría parecer. La primera impresión es muchas veces primordial.

Además, la velocidad de carga, el peso de las imágenes, y el volumen de los contenidos y catálogo web requerirá un soporte web adecuado.

¿Recurro a expertos, o lo hago yo mismo la optimización web?

Al tratarse de un proceso complejo, pese a lo que pueda parecer, la optimización web abarca una reforma integral en la mayoría de los casos y un análisis muy detallado de todos los aspectos internos y externos de la web. Por tanto, recurrir a profesionales no solo no es descabellado, sino recomendable.

La siguiente pregunta es ¿Cada cuánto tiempo debemos realizar un proceso de optimización web? El intervalo es variable, y en todo caso dependerá del volumen de tráfico que genere la web y los objetivos corporativos que se han fijado para la misma. La propia empresa que se encargue de optimizar la página puede establecer los tiempos para nuevas reformas y mejoras en la web.

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